Un regalo divino de Nikola Tesla

La señorita y yo estuvimos discutiendo de nuevo sobre el cristianismo, ya que siento que ella se aferra desesperadamente a ciertas construcciones de creencias de mente estrecha, que le impiden enfrentar sus traumas emocionales subyacentes. Básicamente dijo que no cederá, que siente que su camino es el correcto y que necesita vivir según la Biblia para salvarse, todo lo demás es una distracción del diablo para sacarla de su camino. Al menos así es como percibí lo que me dijo.

Una visión de una locomotora de vapor

Mientras discutíamos, sentí un fuerte trauma emocional en la región del plexo solar, que se relaciona con el sentido del yo y la identidad. Este trauma se sentía como un objeto metálico pesado, opaco, frío y viejo, que bloqueaba todo el flujo de energía a través de mi cuerpo. Tampoco podía pensar con claridad y sentía mucha confusión. Ni siquiera estaba seguro de que este trauma viniera de mí mismo, de la señorita o tal vez de los dos. De todos modos, empecé a centrarme en el trauma de la parte inferior de mi cuerpo, que también se sentía muy pesado y como si me mantuviera en un nivel de conciencia viejo y anticuado. Estuve sentado un rato en silencio, centrándome en las emociones pesadas de mi cuerpo y aplicando técnicas de respiración consciente.

Después de un tiempo, la señorita y yo rezamos a Yeshua para que resolviera este trauma y me ayudara a seguir adelante y a tener una perspectiva clara de nuevo. Esta limpieza del trauma era bastante pesada y parecía desafiante, por lo que pasó un tiempo hasta que vi algún cambio en la visión. Finalmente, después de varios minutos de soportar tranquilamente el dolor, percibí cómo el viejo objeto metálico empezó a moverse y a transformarse y las ruedas empezaron a girar. Me di cuenta de que ese objeto metálico era una vieja locomotora de vapor, que ahora empezaba a moverse de nuevo después de un larguísimo tiempo de parón y estancamiento. Entonces me encontré en la cabina del conductor controlando la locomotora. Vi unas pesadas palancas mecánicas de control que no eran fáciles de manejar, y que requerían mucha fuerza y amplia experiencia para ajustarlas correctamente para que el tren siguiera adelante. Además, me di cuenta de que la señorita también estaba en la cabina del conductor, pero su trabajo consistía en echar carbón al fuego. Al principio, el fuego de la máquina de vapor era bastante pequeño y tenue, pero con el paso del tiempo se iba haciendo más fuerte y violento, a medida que ella ponía un carbón tras otro. El carbón representa los traumas emocionales, que se han quedado atascados en nuestro cuerpo, es decir, lo vivo convertido en carbón sin vida que contiene mucha energía almacenada. El proceso de curación es como un fuego ardiente, en el que la energía almacenada del trauma se utiliza de nuevo para crear un impulso hacia adelante. Sentí que algunos de los carbones eran míos, otros eran de otros, pero la mayoría eran de la señorita. Además, sentí definitivamente que esta locomotora era mía, estaba fusionada con mi conciencia divina masculina, ya que es una máquina técnica compleja, que protege y guía a los que están dentro de ella.

Además, me di cuenta de que en realidad estábamos conduciendo un tren de pasajeros, que estaba bastante lleno. Vi cómo la gente de los compartimentos del tren era del pasado, como indicaba su estilo de vestir, que me recordaba al siglo XIX. Podían ser nuestros antepasados, pero no estaba muy seguro de la relación que tenía con ellos. Aquellos pasajeros estaban en un ambiente de jolgorio, contentos de que el tren volviera a moverse por fin, ya que seguramente llevaban mucho tiempo esperando. Sin embargo, un caballero destacaba entre la multitud: Estaba de pie y esperando allí, bastante tranquilo y reflexivo. Mi atención se centró en él, tenía el pelo negro, un bigote, llevaba un traje de negocios tradicional y un monóculo. También tenía un bastón de madera oscura pero con un mango dorado en la parte superior, que parecía muy elegante. Me encontré de pie frente a este hombre y empezó a examinarme de abajo a arriba de una manera muy sospechosa, como si no estuviera seguro de si estoy listo para lo que tenía que ofrecerme. Entonces me dio una palmada en el hombro, que interpreté como un gesto de aprobación.

¡De repente me di cuenta de que ese tipo era Nikolai Tesla! Una sacudida de energía increíblemente fuerte bajó por mi columna vertebral, ¡no podía creerlo! Anoche incluso se me apareció en un sueño, justo después de que sintiera un «abrazo angelical» y una energía súper intensa que entraba en mi cuerpo. Me preguntaba si tenía algo que decirme y de repente apareció otra visión: Vi mi cabeza con una especie de cristal colocado sobre ella. A continuación, vi cómo se empezaba a formar un poderoso campo magnético toroidal alrededor de todo mi cuerpo, pero sobre el que parecía tener un control consciente a través de mi centro energético del tercer ojo. En mi frente, sentí un fuerte flujo de energía, que incluso se intensificó a medida que la visión continuaba. Este campo magnético era realmente amplio, no sólo unos pocos metros, aunque no podía captar toda su extensión. Por lo que entiendo, se trataba de una mejora importante para mi recipiente físico y mi conciencia en esta forma humana. Es como si con esta mejora, ahora tuviera el potencial de estar más directamente conectado con los seres superiores de otras personas, así como con los reinos superiores en general. Nikolai Tesla y yo nos dimos las gracias, nos dimos la mano y él se bajó del tren, mientras nuestro viaje continuaba. Me vi de nuevo en la cabina del conductor con la señorita que metía cada vez más carbón en el horno. Íbamos a toda máquina hacia «nuevos horizontes».

Interpretaciones y significados

¡Qué visión tan fascinante! No me esperaba en absoluto algo así. La analogía de la locomotora de vapor es realmente muy buena para el trabajo que la señorita y yo estamos haciendo juntos. Hemos desarrollado una colaboración muy extraña, en la que la señorita me trae traumas emocionales oscuros y yo los transmuto en mi típico proceso de trabajo de sombras visuales, que he estado practicando y afinando con el tiempo. Por lo tanto, la señorita está dejando caer un trauma tras otro en las llamas de la curación y yo estoy controlando el proceso de su transmutación en el impulso hacia adelante. Al final, ambos nos beneficiamos, ya que progresamos continuamente en nuestros caminos espirituales a un ritmo increíblemente rápido.

La aparición de Nikola Tesla fue una gran sorpresa y totalmente inesperada. De hecho, anoche percibí el nombre «Tesla» en un sueño intenso, así que esto fue como un anuncio. Además, en el sueño ocurrió algo que no puedo recordar con precisión. Sólo sé que mi cuerpo se inundó de una intensa energía positiva. Ciertamente fue parte de este proceso de actualización, que se completó hoy en el intercambio con Nikola Tesla. Admito que todavía no comprendo del todo lo que ha sucedido exactamente hoy y cuáles son las implicaciones más profundas. Pero eso está perfectamente bien, porque la necesidad de entender siempre todo en cada mínimo detalle está arraigada en nuestras frágiles y asustadas mentes. Ahora que sabemos que tenemos la protección divina a nuestro alrededor y que, en última instancia, estamos a salvo, pase lo que pase, podemos rendirnos completamente al flujo divino y al desarrollo milagroso de esta historia. Una vez que hacemos este cambio de mentalidad, la vida se vuelve mucho más emocionante, ya que hay muchas de esas sorpresas agradables a las que de otro modo no seríamos receptivos si todavía mantuviéramos esas tendencias de control. Sólo sé que hoy he recibido un regalo divino del más alto honor, una mejora de mis habilidades superiores, que se ganó a través de meses de duro trabajo en mí mismo. Estoy eternamente agradecido por este regalo y subrayo mi compromiso de seguir trabajando en mí mismo y de hacer lo que pueda para contribuir a través de mi misión superior.